Siniestro Total
Tres décadas de moda, arte, distinción y elegancia
Las piezas del vestuario exclusivo de Siniestro Total que aquí se presentan, son representativas de tres momentos distintos en la vida del grupo. La música y la moda siempre han viajado de la mano y, en este caso, podemos apreciar el singular diálogo que mantienen con cada momento creativo.
En primer lugar, tenemos una camisa muy seventies de manga corta, en tonos fucsia y rosa, con un original diseño topográfico. Esta prenda es indudablemente de inspiración casi hawaiana, pero sin las estridencias que habitualmente presentan este tipo de camisas. El diseño es original de los talleres vigueses de Manuel M. Romón y aparece en la portada que Oscar Mariné realizó para el disco Menos mal que nos queda Portugal (1984), junto con las versiones en azul y lila y el contraste de la bandera de Vigo y los pantalones verde limón.
Fue asimismo la protagonista de las fotos de promoción y su presencia en los escenarios no pasó inadvertida a los entendidos, que por fin comprendieron la voluntad cosmopolita y el compromiso con la moda de una banda que, desde el primer momento, fue creadora de tendencias. (Foto: Antonio Marcos).
El segundo diseño que presentamos es una camiseta, original de Oscar Mariné, que sirvió de leitmotiv para el álbum En beneficio de todos (1990). El interés del diseñador por la tipografía y los iconos urbanos queda patente por la utilización de la advertencia que se podía leer en las puertas del Metro de Madrid: “En beneficio de todos, entren y salgan rápidamente. No obstruyan las puertas”.
La transformación que sufre el mobiliario urbano en las ciudades modernas dio como resultado la mutilación de parte del texto para dar paso a un obsceno mensaje oculto: “El pene de todos, entre y salga rápidamente. No uyan las putas”. La incorrecta ortografía acentúa, aún más si cabe, la dimensión pop y conceptual de una prenda que superpone ambos textos. El mensaje oculto aparece claramente si se observa a través de un filtro rojo. (Foto: Jordi Socías).
Por último, tenemos un pantalón que formó parte del vestuario del espectáculo, y posterior disco y vídeo, Cultura Popular (1997). Cada miembro del grupo se encargó del diseño de su propia indumentaria pintando encima de unos elegantes trajes blancos. En este caso, el pantalón pertenece a Julián Hernández que optó por la técnica del dripping de Jackson Pollock. El impacto visual de estos diseños fue notable gracias a la utilización de los colores negro, rojo y blanco que, de alguna manera, aparecen recurrentemente en la iconografía de Siniestro Total. (Foto: Iñaki Mintegi).